Este es el mejor facial en casa

Incluso si no te consideras una obsesionada del skincare, la mayoría de los expertos están de acuerdo en que el acto de hacerte un facial no siempre se trata de la piel. Además de hacerte sentir bien, estos rituales (llámese un facial o un masaje) son buenos para nuestro bienestar general. Y, dado que todos estamos experimentando un momento de inactividad forzado, ahora es el momento de renovar nuestra lista de prioridades y poner el cuidado personal en la parte superior.

Y como todas podemos beneficiarnos de un poco de amor propio extra en casa, estos son algunos consejos para aprovechar al máximo los productos y el tiempo libre que tenemos.

DECIDE QUÉ PRODUCTOS VAS A USAR

La base de un facial básico es limpiar, exfoliar, una mascarilla, hidratar y humectar. La limpieza elimina el aceite y la suciedad; el exfoliante disuelve o elimina la piel muerta para que los hidratantes y humectantes penetren mejor en la piel. Esto significa que querrás sacar tu cleanser, una mascarilla de tu elección - dependiendo en lo que tengas en casa y lo que tu piel necesite - un exfoliante, serum y un humectante.

PON EN ORDEN TUS PRODUCTOS

Esto es importante porque, al tenerlos todos en un orden secuencial crean una experiencia más organizada y relajante. Entonces, deja a la mano todos tus productos, herramientas y toallas antes de comenzar.

DESINFECTA, DESINFECTA, DESINFECTA

Una vez que tengas todo listo el consejo es desinfectar el área y lavarte las manos, para asegurarte de que no estás propagando gérmenes de tus productos a tu rostro.

UN FACIAL, PASO-A-PASO

Un desglose del facial más estándar - pero súper efectivo - en cinco pasos. Querrás comenzar con una limpieza tipo spa. Te sugerimos usar un paño de muselina para limpiar la piel y para una suave exfoliación física adicional. Pero, si tus recursos son limitados, una toalla de papel sirve perfecto. El segundo paso es exfoliar y, aunque muchos profesionales usan exfoliantes químicos, un exfoliante suave es tu mejor aliado. ¿Paso tres? ¡Mascarilla! Puedes usar cualquiera que tengas en casa que se adapte a tu piel. El cuarto paso es hidratarte, un favorito es un suero de ácido hialurónico para retener la humedad. Y el último es la humectación, asegurando todo tu trabajo.

RECUERDA: MENOS ES MÁS

Si sientes que no estás haciendo tanto con tu facial en casa como con un profesional, es porque no lo estás haciendo, y eso está bien. Cuando hablamos de tratamientos faciales en tu hogar, menos es más. Si quieres incorporar herramientas, ve por un rodillo de jade o hielo o un Gua Sha (nuestro favorito es este de cuarzo rosa de Kora Organics). De hecho, ponerte 25 productos diferentes en el rostro cuando tienes mucho tiempo de inactividad puede hacer lo contrario a tus intenciones y estresar demasiado tu piel.